8.11.2009

Bitácora de una ausencia inesperada

Quisiera no tener tantos quisiera... pero acá estoy escribiendo quisiera.

En el teclado la letra Q se hunde y veo otro mundo, otros sueños, otras posibilidades, otras cosas donde todo podría estar mas perfecto, un mundo en el que tal vez no exista para muchos, un mundo en el que para mí sólo exista alguien, un mundo aparte.

¿Cómo se aparta un mundo?
¿Cómo se logra crear algo así?

No me importa, no me incumbe. Es más: hasta lo siento imposible.
Pero eso no quita que me siente a escribir Quisiera.
Quisiera que estuvieras bien en un mundo bonito, perfecto a tu medida, sin importar si para su perfección mi papel ahí no trascienda. Quisiera que estuvieras bien en tu mundo sin un extraño que venga a contaminar tus ideas.
Hoy no me importa si tu bienestar está ligado al mío o si la distancia me haría daño.
Hoy sólo quisiera, hoy sólo quiero arcoiris para tí.
Hoy dudo si mi mano interrumpe que los arcoiris se creen solos en tu mundo, entonces reprimo mucho.
Hoy no sé si será mejor el silencio.
Pero creo que es lo que menos interrumpe, entonces me quedo callada, no influyo.

Si me quieres.
Si me necesitas grita: sería feliz de escucharlo... aún en medio de la conmoción de saber que tuviste que gritar. Te aseguro. Te digo que te aseguro que no alcanzarías terminar la segunda A del grito y ya estaría ahí enfrente tuyo.
No prometo arreglar nada, pero dame un argumento para luchar con todo la irracionalidad y energía de mi ser para tratar de hacerlo.

O sólo estar ahí, por qué sé casi que con convencimiento estúpido que aún en medio de la mierda podría hacerte reir. Tengo mis maneras.

Ahora bien. Esto en el camino de las cosas que hacen las personas para trascender a sus cosas está lejos de contar como un paso, esto es medio paso, y espero tranquila que des el otro medio, encontrémonos a mitad de camino, cuando puedas o quieras. Si quieres.
En ésa medida siento mucho no poder dar el otro medio, pero aún siento que dar un paso completo, en nuestra situación, sería imponerlo.

Starving for an argument. Anything at all to break the silence.




3 comentarios:

Gaby dijo...

Esos "quisiera" te hacen perfectamente humana... Que sería de nosotros si no tuviéramos que desear, si estuviéramos completos, con todos nuestros deseos satisfechos? Seguramente, nos paralizaríamos , perderíamos capacidades maravillosas que nos conectan no sólo con la vida sino con nuestros pares...
Tu quisiera es hermoso y una vez más habla de la grandeza de tu ser, de que todo lo vivido, aun en su negrura, no fue en vano y te enriqueció muchísimo... Vales mucho y emociona que exista alguien como vos en un mundo que es bastante mierda...
Querer a alguien, dejandolo ser es la mejor manera de hacerlo... Ojalá que el reencuentro se produzcan, un reencuentro entre dos alma y consigo mismo...
Quisiera eso para vos!!!!
Es imposible no quererte, Andre... El silencio a veces sólo implica tiempo!!!
Te quiero mucho, hermosa!!
Siempre es muy emocionante leerte!!!

Isaac Carrascal dijo...

Un comentario sin comentario:

leí avídamente ésta publicación ( es posible llamarla así?) puesto que antes no me era posible leer tu blog.
Considero que alcanzas un tono que es a la vez personal y general, que nos identifica y que me transmite muchas cosas que son, por asi decirlo, idiosincráticas de ti.
Me quedo en asterion por q el chico áquel no te conoce.

BEATRIZ dijo...

Lynda,

quiza la voluntad es la única fuerza para avanzar...quizá no sea la única pero estoy segura que influye en los destinos, creo que así es como se es alguien.

Un placer haber vuelto