Cómo se sabe cuando fue suficiente?
De donde se pueden sacar los parámetros adecuados para decir que ya estuvo bueno, que hay que seguir adelante o que hay que poner límites?
Tenemos límites?
Dejando la filosofía de cajón a un lado, creo que no tenemos límites. Por que de tener límites, los muchos tipos de agresiones no existirían, de tener límites, sabríamos medirnos mejor antes de llegar como gigantones torpes a destruir tantas cosas en el otro... de tener límites... seríamos ilimitadamente correctos.
Ahora bien, por qué carajos a la gente se le metió en la cabeza que lo correcto es lo aburrido? que necesitamos problemas y necesitamos de drama o de cosas duras para ser mejores? Por qué el ser humano tiene que ser el que lucha, el que hace, el que pone y se interpone? Por qué la creencia de que si todos tuviéramos un vivir tolerante y respetuoso... sin problemas... todo sería monotno y deprimente al punto de aumentar los índices de suicidios?.
Mi teoría: Miedo. Torpe torpe miedo.
Así como la mujer o el hombre (en la mayoría de los casos) lo piensa dos veces antes de desnudarse y mostrar su cuerpo todo cubierto únicamente por piel. Psicológicamente (de nuevo, en algunos muchos casos), necesitamos del tapujo de cierta condición económica, cierto sentido de pertenencia a cierto grupo social o cultura, cierta excusa del pasado (Es que yo sufrí, yo viví, yo pasé...) o cierto drama actual (Mi familia es tal, mi hermano/primo/tio está enfermo de bla, estoy con tal condición) para ser, para estar... para sentir que podemos o tenemos algo que nos diferencia, casi casi se vuelve un deseo inconciente de ser nuestro propio caballero de la armadura que combate su Némesis, porque de no ser la heroína o el héroe de la historia, entonces quien somos?... El miedo a no ser o no estar, la necesidad de pruebas y certificados de casi todo.
Por qué? Porque ya creemos que todo lo que no se demuestra no existe. Porque nos hemos vueltos tan perezosos, tan facilistas... tan de todo... que ya no vemos como reto mantenernos... mejorar... aprender. En pocas palabras, ya no somos autodidactas. Sino que tenemos la ilusión de la necesidad de una vida trabajosa (escuela de la vida) para sentir que así podremos crecer.
Entonces yo creo que va siendo tiempo de por lo menos desnudarnos frente a un espejo psicológicom propio, de vernos sin los dramas, ni triunfos, de vernos en el día a día, en lo que llamamos normalidad... es tiempo de reconocer a esa persona que genéticamente tienen un cóctel de ideas y sustancias en su cerebro infinitamente diferente al de al lado y supremamente único. Es tiempo de entendernos y conocernos... para luego tener el gusto de volvernos autodidactas, de vivir sin luchar, sino disfrutar del aprendizaje que nos implica crecer solitos. Mirarnos en un espejo para ponernos lo de adentro para afuera y hacer de nosotros una entrega propia que "maxifique" la belleza de la vida.
De donde se pueden sacar los parámetros adecuados para decir que ya estuvo bueno, que hay que seguir adelante o que hay que poner límites?
Tenemos límites?
Dejando la filosofía de cajón a un lado, creo que no tenemos límites. Por que de tener límites, los muchos tipos de agresiones no existirían, de tener límites, sabríamos medirnos mejor antes de llegar como gigantones torpes a destruir tantas cosas en el otro... de tener límites... seríamos ilimitadamente correctos.
Ahora bien, por qué carajos a la gente se le metió en la cabeza que lo correcto es lo aburrido? que necesitamos problemas y necesitamos de drama o de cosas duras para ser mejores? Por qué el ser humano tiene que ser el que lucha, el que hace, el que pone y se interpone? Por qué la creencia de que si todos tuviéramos un vivir tolerante y respetuoso... sin problemas... todo sería monotno y deprimente al punto de aumentar los índices de suicidios?.
Mi teoría: Miedo. Torpe torpe miedo.
Así como la mujer o el hombre (en la mayoría de los casos) lo piensa dos veces antes de desnudarse y mostrar su cuerpo todo cubierto únicamente por piel. Psicológicamente (de nuevo, en algunos muchos casos), necesitamos del tapujo de cierta condición económica, cierto sentido de pertenencia a cierto grupo social o cultura, cierta excusa del pasado (Es que yo sufrí, yo viví, yo pasé...) o cierto drama actual (Mi familia es tal, mi hermano/primo/tio está enfermo de bla, estoy con tal condición) para ser, para estar... para sentir que podemos o tenemos algo que nos diferencia, casi casi se vuelve un deseo inconciente de ser nuestro propio caballero de la armadura que combate su Némesis, porque de no ser la heroína o el héroe de la historia, entonces quien somos?... El miedo a no ser o no estar, la necesidad de pruebas y certificados de casi todo.
Por qué? Porque ya creemos que todo lo que no se demuestra no existe. Porque nos hemos vueltos tan perezosos, tan facilistas... tan de todo... que ya no vemos como reto mantenernos... mejorar... aprender. En pocas palabras, ya no somos autodidactas. Sino que tenemos la ilusión de la necesidad de una vida trabajosa (escuela de la vida) para sentir que así podremos crecer.
Entonces yo creo que va siendo tiempo de por lo menos desnudarnos frente a un espejo psicológicom propio, de vernos sin los dramas, ni triunfos, de vernos en el día a día, en lo que llamamos normalidad... es tiempo de reconocer a esa persona que genéticamente tienen un cóctel de ideas y sustancias en su cerebro infinitamente diferente al de al lado y supremamente único. Es tiempo de entendernos y conocernos... para luego tener el gusto de volvernos autodidactas, de vivir sin luchar, sino disfrutar del aprendizaje que nos implica crecer solitos. Mirarnos en un espejo para ponernos lo de adentro para afuera y hacer de nosotros una entrega propia que "maxifique" la belleza de la vida.
* *Esta entrada la escribía con el objetivo inicial de hacer un reclamo, pero en la escritura me fui dando cuenta de que hay muchas cosas que no me he reclamado antes. Escribir en plural y saber que soy humana como el resto, me ayudó muchísimo a ver que mi dolor ahora, no es diferente al que causé o al que han causado muchos ya... y realmente creo que el entendernos como seres, hará que un día ojala no muy lejano... persona por persona vaya teniendo cada vez menos movimientos torpes hacia el otro y aprenda a ser y estar, sin herir o sufrir.
3 comentarios:
Andrea..
Me alegra mucho abrir tu blog y encontrarte, así como llamar a tu puerta y que ésta se abra...
El miedo es un sentimiento primigenio natural en los seres humanos, igual que el amor o la tristeza al miedo hay que saber encausarlo para que no perjudique, el miedo puede salvarnos de muchos peligros como el instincto de supervivencia. No me gusta el miedo pero lo acepto, cuando está soy conciente, quiza ese sea el primer paso para combatirlo.
Un placer tu entrada.
Te abrazo el alma
Me encantó tu entrada!!! Con tus palabras y razonamientos disparaste más interrogantes en mí!!
Lo correcto no tiene por que ser aburrido así como "portarse mal" no necesariamente es divertido. Cuánto tiempo disponible tendríamos para divertirnos si tomaramos las cosas de otro modo, no??
Los límites son necesarios!! Con lo autodestructivos que somos los seres humanos, garantizan la supervivencia!! [esa sería la función positiva]
Coincido con vos, eso de desnudarse frente al espejo psicológico debe ser maravilloso, poder reconocernos más allá de los problemas u ocupaciones sino en la esencia misma de nuestro ser!! Me gusta!! Por pertenecer, muchas veces, nos limitamos [ en un sentido, negativo]y nos privamos de muchas cosas!!!
Siempre es un placer leerte!!
Millones de besos, hermosa!!
Yo no estoy segura de que el miedo este inyectado en el flujo de la sangre o sea un guiño inventado. (punto)
Eres una chica soñadora.
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